Buscar trabajo puede suponer un trabajo en sí mismo. Por primera vez en años, nos encontramos con un mercado laboral en el que hay escasa demanda de trabajadores y excesiva oferta de los mismos. Por eso hay un 27% de paro en España, y por eso un 40% de jóvenes Licenciados están en paro.

La situación es, además igual de dramática para gente cuya experiencia profesional es un grado, pero cuya edad (gente que supera los 40) supone un impedimento casi insalvable para conseguir un nuevo trabajo.

¿Qué puedes hacer ante esta situación? Aprovechar cada oportunidad que existe, y ser más rápido que el resto de la gente que opta a un puesto de trabajo como el que quieres conseguir. Es así de simple, darwinismo puro y duro, o te adaptas, o te extingues.

Planificacion en la búsqueda de empleo CUALIFICA2Para ayudarnos con esta tarea, tenemos que tener clara y sincera respuesta a muchas preguntas: ¿qué jornada queremos o necesitamos? ¿qué tipo de trabajo? ¿ubicación? ¿estamos dispuestos a irnos al extranjero, o a viajar con frecuencia? ¿tipo de contrato? ¿salario mínimo? y además, la importancia de cada factor, ya que quizá os ofrezcan un trabajo pero no es exactamente lo pensado, ante lo cual se tienen más opciones si se tiene la capacidad de amoldarse al puesto de trabajo, características, salario… será complicado que haya un traje a medida con lo cual lo más sensato es ser flexibles a las propuestas, ya que las empresas tienen muchos profesionales donde elegir, y el objetivo es encontrar un empleo.

Una vez aclarado lo anterior, comienza la planificación y búsqueda activa. Quizá antiguamente buscar empleo era cosa de dedicarle una, dos o tres horas a la
semana, pero hoy en día no es así, y gracias a la planificación iremos completando las distintas opciones de ofertas de empleo, así como aprender información muy valiosa que nos servirá para estar más preparado y cumplir los requisitos. No es época de que el trabajo llegue por su propia cuenta, por tanto para tener oportunidades, además de apuntarse a distintos servicios de colocación, bolsas de empleo, etc., hay que ser proactivo y realizar la búsqueda de empleo ordenada y planificada.

En primer lugar, podemos planificar la forma de apuntarnos a las distintas bolsas de empleo y candidatos, tanto públicas, de sindicatos, centros educativos, asociaciones… hay muchas más de las que pudiera parecer. Para planificarlo, podemos recopilar en un documento la relación de las mismas, y apuntar en qué fecha hemos ido a entregar el CV.

También hay que intentar averiguar por qué razones no nos han admitido en algunos puestos de trabajo, si fuera posible. Esto nos dará pistas y se podrá deducir qué requisitos nos faltan, y si son formativos o de preparación: es posible que tengan solución. Sin una adecuada planificación, la cual debe incluir una recogida de datos, conclusiones, observaciones, distinta orientación, tipos de entrevista… no podremos saber en qué hay que mejorar para lograr el puesto de trabajo en una próxima oportunidad. Esto se puede completar con la información de requisitos que se piden en las distintas ofertas de trabajo a las que hemos decidido presentarnos.

Se puede ser también proactivo, haciendo una relación de qué empresas pudieran necesitar un perfil similar al nuestro a pesar de no ver ofertas de trabajo, y de forma planificada, quedar con las mismas o presentarse a puerta fría (según se pueda) y entregar el CV, ver qué posibilidades hay, etc. También aquí conviene anotar todas las impresiones recibidas, en este caso la información recibida es complementaria.

Y por supuesto, Internet es un gran aliado en la búsqueda de empleo. Podemos planificar el recorrido por los diferentes portales que existen para ver ofertas. Cada empresa puede utilizar sitios distintos, luego no hay que ceñirse a un único portal.