(Viene de la Parte II).

Hoy queremos finalizar esta serie de artículos con algunas de las competencias que consideramos clave en el ámbito empresarial.

Capacidad para trabajar bajo presión

El estrés se define como la presión generada por una situación que creo no poder controlar. El trabajo bajo presión puede ser entendido como aquel trabajo que se realiza bajo condiciones adversas de tiempo o de sobrecarga de tareas, y que demanda mantener la eficiencia y no cometer más errores de lo habitual.

Esa demanda para mantener la eficiencia debe estar basada en la capacidad de autogestionar las propias emociones e implica la resistencia en condiciones constantes de estrés. Y es quizás la clave para poder avanzar de una manera idónea profesionalmente en el entorno que vivimos y una vez adquiridos los conocimientos en la carrera.

Estrés - CUALIFICADesde un punto de vista profesional, el estrés puede llegar a ser beneficioso en la medida en que fortalece a la persona, la ayuda a mantenerse alerta y centrada en sus objetivos y demuestra de qué pasta estamos hechos cada uno, siempre que seamos capaces de gestionarlo.

El control no sólo activa el centro ejecutivo del cerebro en la corteza prefrontal, sino que también lo altera para que se active posteriormente, incluso cuando el factor estresante no sea controlable. Esta activación «apaga» las células que regulan el estado de ánimo en el centro de alarma del tronco cerebral.

Desarrollar esta capacidad proporciona un equilibrio profesional y mantiene las propias emociones bajo control, evitando reacciones negativas ante provocaciones, oposición u hostilidad por parte de otros o cuando se trabaja en condiciones de estrés. Asimismo, implica la resistencia en condiciones constantes de estrés.

  1. Evita las situaciones de alto estrés: reconoce y se aleja de situaciones que le generan estrés. Ante situaciones que le generan mucha carga emocional evita demostrar comportamientos poco profesionales, como por ejemplo levantar la voz cuando está enojado. Controla sus emociones, sin actuar para mejorar las cosas.
  2. Responde manteniendo la calma: siente emociones fuertes tales como enfado, frustración extrema o estrés elevado, pero las controla y continúa hablando, actuando o trabajando con calma. Toma acciones para mantener la calma y responder con efectividad. Ej. cambia de lugar, cambia de ambiente físico, entra y sale de la reunión o toma descansos cortos. Ignora las acciones que pretenden provocar su enfado y continúa la conversación.
  3. Calma a otros: cuando enfrenta situaciones de alto estrés, elabora argumentos, da mensajes, usa su sentido del humor para transmitir calma y disminuir la tensión de los demás miembros del equipo. Aplica técnicas para el manejo del estrés. Puede trabajar en situaciones de estrés prolongado calmando a otro.
  4. Consigue controlar impulsos perjudiciales, que pueden generar la toma de control de una conducta negativa.
  5. Evita responder sin pensar, especialmente en situaciones de mucho estrés.
  6. Elude demostrar conductas poco aceptadas en un ambiente laboral.
  7. Evita dejarse llevar por la emocionalidad de otras personas o de la situación misma y permite dar respuestas proporcionadas emocionalmente ante determinadas situaciones.

 

 Resolución de conflictos y técnicas de negociación

La resolución de conflictos se puede aprender, desarrollando esta competencia a través de un proceso adecuado: “Identificar, definir y analizar el problema, buscar soluciones y alternativas adecuadas a las partes” Al igual que los conflictos son una constante en nuestra vida, negociamos permanentemente a distintos niveles para solucionar y resolver los conflictos (en el trabajo, con los amigos, con los padres, etc.). La negociación es la herramienta que nos permite resolver los conflictos.

Definimos técnicas de negociación como el proceso por el cual se resuelven los conflictos, aproximando los intereses de las partes implicadas hasta conseguir un resultado aceptable para ambas. En una negociación hay que tener en cuenta el poder que se ejerce en la misma, las necesidades e intereses de las partes, el tipo de negociación y la estrategia que queremos aplicar y las personas que intervienen en el proceso (personas con diferentes percepciones, emociones y actitudes).

Los niveles de comportamiento y características asociadas a esta competencia en un buen negociador son:

  • Le gusta negociar. Se siente cómodo solucionando conflictos.
  • Tiene una actitud positiva (ganar – ganar) integrando las diferentes opiniones y necesidades de las partes.
  • Conoce la materia o el tema tratado en profundidad.
  • Tiene habilidades de comunicación (empatía y escucha activa). Es un buen oyente, escucha antes de hablar.
  • Observa y analiza (analizando a fondo propuestas, enfoques y alternativas).
  • Se muestra sociable y persuasivo. Establece relaciones rápidamente y busca el beneficio mutuo.
  • Es respetuoso (mostrando interés por las necesidades del otro e identificando sus intereses)
  • Es honesto y profesional. No busca engañar y no mezcla temas personales y profesionales.
  • Es flexible en el enfoque y firme en el fondo. Facilita la toma de decisiones, desarrollando soluciones que sean fáciles de aceptar.
  • Posee autoconocimiento y confianza en sí mismo. Es realista en cuanto a sus puntos fuertes y débiles.
  • Es ágil y resolutivo al plantear soluciones y tomar decisiones.
  • Acepta el riesgo y tolera bien los conflictos.
  • Se muestra paciente y persistente en el proceso negociador.
  • Es creativo, busca y encuentra alternativas y enfoques beneficiosos para todos.

 

 Búsqueda de la excelencia

Cuando se habla de búsqueda de Excelencia a nivel empresarial ha de interpretarse, (en el sentido más práctico y realista), como los saltos consecutivos por los cuales las organizaciones atraviesan, en una sucesión de estados cada vez más propicios para sus intereses.

Cuando se habla a nivel personal no consiste e intentar alcanzar la perfección, algo imposible, sino adquirir el hábito, la necesidad, el principio de hacer las cosas del mejor modo que podemos cada uno de nosotros. No es un proceso de competencia con nadie, no se busca el reconocimiento sino que radica en un modo de vida.

Supone la adopción de horizontes, medios, procedimientos y técnicas profesionales para llegar a un estado de mayor calidad: más ingresos, menos costos, incremento en la satisfacción personal y general, aumento de inversión a futuro… Tuvo su origen en la Industria Japonesa donde se consiguió el paradigma de aunar calidad de trabajador con calidad de producto y proyectarlo hacia el Cliente y el Mercado. Hay algo que distingue al ser excelente de todos los demás: su idea de seguir creciendo.

Para el ser excelente el desarrollo no es una opción, es algo natural e inevitable que debe aprender a vivir a fin de sacarle el máximo provecho; es más, el ser excelente no sólo sabe que el crecimiento es algo que debe suceder, sino que desea verlo suceder en su propia vida. Son las diferentes dificultades asociadas las que hacen de crecer algo real.

Dado que la búsqueda de la excelencia persigue la integración eficaz de actividades en términos de costos dentro de todas las unidades de una organización, puede extenderse el perfil profesional relacionado a numerosos ámbitos y sectores muy heterogéneos.

  • A nivel personal cualquier entorno laboral es propicio al desempeño de esta capacidad y si bien no es una cualidad destacada en los departamentos de Recursos Humanos en el momento de la contratación, sí es la base del crecimiento y ascenso del individuo dentro de las entidades.
  • A nivel institucional contar con un plan de mejora o de consecución de excelencia se ha convertido en un requisito indispensable para cualquier empresa que da sus primeros pasos, se quiere estabilizar en su nicho de mercado o pretende crecer y expandir su línea de negocio o área de actividad.

 

La habilidad para lograr y sostener la excelencia exige la mejora continua y deliberada de todas las actividades de una empresa (no solo de producción) incluyendo la investigación, diseño, el marketing, finanzas, producción, apoyo logístico y la distribución y venta. La excelencia general del grupo de trabajo se apoya en las excelencias particulares de los trabajadores. Perfiles diversos que implican que este concepto está requerido independientemente de la antigüedad en la permanencia en la entidad, el tipo de ésta o el cargo que se ocupe.

Innovación

Innovación es la secuencia de actividades por las cuales un nuevo elemento es introducido en una unidad social con la intención de beneficiar la unidad, una parte de ella o a la sociedad en conjunto. El elemento no necesita ser enteramente nuevo o desconocido a los miembros de la unidad, pero debe implicar algún cambio discernible o reto en el status quo.

Los indicadores para medir esta competencia en un individuo pueden ser:

  • Propicia un entorno de trabajo innovador e imaginativo.
  • Fomenta la generación de ideas en los demás.
  • Experimenta continuamente con nuevas ideas o soluciones, originales y poco convencionales.
  • Soluciona problemas que implican un alto grado de creatividad.
  • Crea oportunidades para desarrollar tareas nuevas.
  • Impulsa cambios en su área de influencia.
  • Está atento a los cambios del mercado y de las necesidades del cliente/usuario para responder adecuadamente.

Podríamos definir tres niveles de comportamiento asociados:

  • Básico: impulsar la introducción de cambios y nuevas formas de hacer las cosas para lograr una mejora, identificando oportunidades de innovación y conociendo las experiencias y avances de otros profesionales u organizaciones.
  • Medio: generar y desarrollar ideas nuevas para la resolución de problemas y el desarrollo eficiente del trabajo, rompiendo los esquemas tradicionales y evaluando los resultados.
  • Superior: proponer innovaciones a nivel de gestión, estructura y estrategia. Para ello se define y pone en marcha proyectos de referencia en la organización, que conducen a resultados innovadores. Afianzar las innovaciones implantadas de modo que estas generen innovaciones posteriores.

Emprendimiento

Emprendedor se aplica a empresarios de naturaleza innovadora, (virtud esta de conexión intrínseca) que agregan valor a su trabajo o a un producto, a las personas que encaran sus actividades profesionales desde un punto de vista menos conservador y por extensión a cualquier individuo cuyo comportamiento se caracterice por la huida de estereotipos, el rechazo a las trabas en los procesos productivos y la búsqueda diaria de nuevos caminos que llevar al proceso productivo.

Innovación - CUALIFICAEs lo que permite avanzar un paso más, ir más allá de donde se ha llegado, afrontar retos y superar resultados. El emprendimiento hoy en día, ha ganado una gran importancia. Por un lado, por la necesidad de muchas personas de lograr su independencia y estabilidad económica, lo cual implica la creación de una empresa propia y por otro lado por ser un perfil deseado y buscado en las contrataciones y, por tanto, facilitando la incorporación al trabajo por cuenta ajena. Dependiendo de los países se ha potenciado o devaluado esta característica. En nuestro país, hasta hace no mucho tiempo, no se gozaba de una cultura que apoyase el emprendimiento, más bien sin embargo, ha sido un concepto denostado en favor de la búsqueda del llamado “trabajo fijo”. En los últimos años, el nivel de desempleo acompañado por una baja calidad de los empleos existentes ha propulsado en las personas la necesidad de generar sus propios recursos y de cruzar la frontera de ser empleados a ser empleadores.

El espíritu emprendedor no es un rasgo que algunas personas u organizaciones poseen de una manera completa y del cual otras están totalmente desprovistas sino que entra a formar parte de un rango de comportamiento.

Las investigaciones de percepciones de los ejecutivos describen el espíritu emprendedor con términos como innovador, flexible, dinámico, capaz de asumir riesgos, creativo y orientado al crecimiento.

Aunque por error se asocia emprendedor con trabajador de empresa relacionada con las tecnologías de la información y las comunicaciones, es una característica propia de cualquier sector de actividad. Compañías como Apple, Chupa Chups o Facebook encarnan la dualidad innovador-emprendedor. Ser emprendedor es un distintivo inherente a la persona y por tanto encontrable en un comerciante o un maestro, en un militar o un enfermero, en un programador o un mecánico.

Es preciso disociar emprendimiento e innovación y TIC’s, dos conceptos que muchos son incapaces de diferenciar. Empresas que utilizan tecnologías no muy nuevas como Nespresso y Starbucks han revolucionado sus entornos de crecimiento mediante personas con nuevas ideas, distintas formas de ver la realidad respecto al modo tradicional y carácter rompedor frente a formas de proceder a priori inamovibles.

La generalidad del espíritu emprendedor se manifiesta en la supresión de barreras de tamaño de la empresa; la más pequeña constituída por una única persona compite y se vanagloria de su capacidad emprendedora de igual forma que la consultora estratégica con presencia en los cinco continentes.

El concepto de emprendimiento, como el de innovación parece ser una moda o una novedad en el terreno del management y la organización, aunque bien pudiera decirse que innovar no es nada innovador. A lo largo de la historia muchos casos de éxito laboral se han basado en un emprendedor que aplica un nuevo enfoque sobre conceptos anteriores, como por ejemplo Coca-Cola o Ford.

Liderazgo

Las definiciones de esta competencia radican en la capacidad personal para actuar como soporte, indicador o guía de los demás, influyendo en la conducta e inspirando comportamientos alrededor.

Analizando la descripción anterior se incluye una distribución desigual del poder entre los líderes y los miembros del grupo.

Liderazgo - CUALIFICALos miembros del grupo no carecen de poder, lo tienen pero siempre por debajo del considerado como líder. Liderazgo implica más de una persona, (si no hay a quien mandar, influir, representar o guiar, no hay liderazgo), trabajadores, seguidores, enfermos, simpatizantes, todos ellos con el nexo común de aceptar las decisiones del líder y permitir que funcione el proceso de liderazgo. Y como base, está la creación de valor y la sustentación en valores. Un líder que no se apoya en componentes morales no tendrá la solidez necesaria para influir a medio plazo.

El mundo laboral está en permanente cambio. Este paradigma, que se toma por cierto desde hace décadas, ha experimentado una aceleración proporcional a los cambios que la sociedad ha ido experimentando en los últimos años.

La situación generalizada de crisis obliga a los responsables y líderes de las empresas a retener a sus jóvenes talentos, a minimizar el nivel de rotación de sus empleados y a especializarse en el proceso de captación de valor en la contratación del nuevo personal.

El liderazgo venidero, presente en cualquier área laboral y no laboral, exige jefes de comportamiento democrático, estructuras menos piramidales y mezcolanza de categorías.

Existe una nueva tendencia a la generación de comunicación horizontal, a la definición de estrategias de más igualdad y a imponer los valores de liderazgo por el camino del carisma y no de la posición. Los grupos de trabajo y la colaboración aprovechando las nuevas posibilidades de la web 2.0, fomentan la generación de la innovación, las ideas creativas y la posibilidad del emprendimiento por parte de los miembros de una corporación. El líder es ahora democrático y fomenta la disparidad de opiniones, evalúa de forma clara y no impone su criterio sobre el grupo sino que aporta su conocimiento y empatiza con el de la colectividad.

El liderazgo es cada vez más humano, con mayores dotes de comunicación y profunda comprensión de los puntos de vista de cada uno de los miembros de determinado grupo de trabajo.

Estas nuevas características refuerzan la necesidad de formar nuevos líderes y la importancia y relevancia de la mujer, que ha demostrado mayor facilidad para involucrar actitudes, sentimientos, valores e intereses De esta manera, el liderazgo femenino ha sabido posicionarse dentro de una sociedad cambiante, eliminando las trasnochadas percepciones negativas en cuanto al desempeño laboral y mejorando el rendimiento laboral del equipo.